independencia

Mas vino para la Serafina, quien se inspira demasiado con el acohol, brebaje que además le da de comer. Claro, soy una profesional del alcohol. Debo tener cuidado, pero a mi no me importa porque soy como la estrella infinita que mira hacia cada orbita. Como un Jupiter y un Venus posando para un fotografo caliente y homosexual para que no se le pare y no me ponga en aprietos ni compromisos banales. Me sorprendo de lo que escribo, esto va de las entrañas prohibidas del sistema ABC1 en el que uno debe ser "educada" y no dejar entrever los deseos sexuales, específicamente reprimidos. Uh, me alimenta en este momento el vino tinto y un tabaco, dos vicios que amo. Y la verdad es que no tengo mucho que contar. Solo que vivo en región ahora, en un pueblucho aislado de toda cultura en el que es muy fácil destacar, porque cualquier cosa es impresionante. Es bueno eso de los provincianos. Quiero mas poesía. Por que en Santiago pasa todo y aquí, aquí en medio de las estrellas, la oscuridad y el silencio no puedo encontrar la inspiración que esperaba con tanto ahínco (ojo la palabra que he usado, significa, que estoy aprendiendo algo nuevo). Juego a la pelota ahora y mañana tengo que trabajar, no sé como me levantaré, pero anhelo tener un departamento en el barrio santa lucía y levantarme a almorzar en el mercado central de Santiago y luego ponerme a escribir y que alguien lea la mierda que escribo y que de pasada, me de de comer. De cocinar, poco. Solo he preparado tres platos en tres meses, zapallos italianos, porotos y lentejas. Y luego han sido puros tomates con atun y paltas del valle con papas y huevos cocidos. La musica ha sido mi mejor acompañante, uno de los mas fieles. No tengo tele y he aprendido a leer el diario. Un poco caro si, pero me gusta, uno elije lo que quiere saber. No como a tele, que te obliga a ver mierdas y a asustarte. Bueno y mi lesbianismo sigue en mi, siempre. La amo y me gusta mucho estar con ella, pero ahora estamos tan lejos que me aburre nuestra relación virtual y de "unidos" que no sé si masturbarme o esperarla. No lo sé, solo sé que me gustaría estar con ella y que me abrace como en los viejos tiempos. No quiero que la relación se abrume o se sature (dos palabras sinónimas desde el punto de vista de las nubes, pero que espero no sucedan a la vez). Estoy un poco ebria y me encanta ecribir así, porque nace todo mi espiritu natural y es triste quizás, pero el alcohol me hace sentir en un completo yo. Cuando estoy sobria, soy yo, pero no soy igual. No me expreso con la misma libertad. La libertad y nada más que decir por ahora.